Obligan a cerrar por dos meses un bar que impidió las mediciones de ruido

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo ha desestimado el recurso del establecimiento y ratifica el cierre y la multa de 2.001 euros impuesta en 2006 por el Ayuntamiento de Palencia

diariopalentino.es

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Palencia ha ratificado la suspensión de dos meses en su actividad y una multa de 2.001 euros a un establecimiento de hostelería de la calle Colón de la capital por impedir que los agentes de la Policía Local, junto a un técnico municipal, llevaran a cabo la labor inspectora relativa al ruido.

La sanción, que data, como recoge la sentencia a la que ha tenido acceso Diario Palentino, del 26 de octubre de 2006, fue recurrida por el establecimiento hostelero al creer que dicha resolución no se ajustaba a derecho, «por infracción del principio de legalidad, y tipicidad», porque los hechos denunciados «no eran ciertos» y porque se ha vulneraba «el principio de vulnerabilidad al carecer de antecedentes».

Sin embargo, la jueza ha entendido probado en el acta de la Policía Local, que el 19 de mayo de 2006 y tras diversas quejas de los vecinos sobre el nivel acústico del sistema de sonido del local, los trabajadores municipales pretendieron realizar una medición para comprobar la eficacia del limitador de sonoridad «reparado el 6 de marzo de 2006».

Una inspección que «no pudo realizarse porque lo impidió el titular», contraviniendo así la Ley de Prevención Ambiental de Castilla y León, constituyendo una infracción grave.

De esta forma el Juzgado de lo Contencioso Administrativo da la razón al Ayuntamiento, que impuso la sanción más baja de las que recoge la normativa Autonómica para una infracción grave. No por superar los niveles de ruido sino por impedir su medición.

A pesar de que la sentencia es recurrible en apelación, el local ha decidido cerrar sus puertas y cumplir la sanción impuesta.

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