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Gijón, 27/07/05
El juez obliga al Ayuntamiento a retirar la «Semana negra» del entorno de El Molinón
Los vecinos del edificio «Gacela» ganaron un contencioso presentado en 2004
ALBINA FERNÁNDEZ El magistrado-juez de lo contencioso, Jorge Rubiera Álvarez, estimó parcialmente un recurso de la comunidad de propietarios del edificio «Gacela», situado en la calle Sporting, y anuló, «por no ser conforme a derecho», la resolución municipal de 8 de julio de 2004 que permitió la celebración de la «Semana negra» del pasado año en el entorno de El Molinón. La sentencia incluye la prohibición de ubicar las «sucesivas ediciones» de la «Semana negra» a una distancia mínima de 500 metros del citado edificio, «dadas las molestias y ruidos que repetidamente se han producido».
El letrado de los vecinos, Marcelino Abraira Piñeiro, defiende que, en la práctica, esta sentencia obliga al Ayuntamiento a no celebrar las próximas ediciones en el entorno de El Molinón, porque, explica, «si tienen que guardar una distancia de 500 metros no hay sitio en la zona».
El Ayuntamiento defendió en este pleito que la celebración de determinados eventos de interés público, como la «Semana negra», permite elevar los niveles sonoros con carácter temporal en la calle, lo que afecta necesariamente a los niveles sonoros en el interior de las viviendas. El juez rechazó esta tesis, ya que, señala en la sentencia, la modificación de los niveles sonoros en el exterior repercute en los ciudadanos que transitan por la calle, pero, precisa, eso no significa que se puedan modificar los niveles en el interior. Y resalta que «está probado» que durante la celebración de la «Semana negra» del pasado año «los ruidos en el interior de las viviendas del edificio demandante fueron superiores a los permitidos por la ordenanza».
El juez aclara que en la sentencia no se dice dónde ha de ubicarse la «Semana negra», sino que, «a la vista de los incumplimientos constatados en materia de ruidos en el interior de las viviendas», exige que se desplace a un mínimo de 500 metros de la ubicación actual.
Esta es la segunda sentencia que obliga a modificar la ubicación de la «Semana negra». El Tribunal Superior de Justicia de Asturias falló en noviembre de 1999 que debía abandonar los alrededores del parque Inglés, porque las mediciones efectuadas por la Policía Local en horas nocturnas y con las ventanas cerradas durante las ediciones de 1995 y 1996 demostraron que el ruido excedía con mucho el tolerado para el interior de las viviendas, lo que, según la citada sentencia, «constituye un menoscabo del derecho a un medio ambiente adecuado para las personas».
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