Oviedo, 16/01/04 El fiscal rechaza la denuncia de Afectados por la MovidaSeñala que no puede actuar contra el fenómeno de manera conjunta, pero sí lo hará en cada caso concreto de bares que incumplan precintos o requerimientosMarta Frechilla
Herrero explicó ayer que la Fiscalía «no puede hacer la actuación conjunta», aunque se comprometió a seguir «actuaciones independientes» en el control de los locales de copas que incumplen los precintos y cierres municipales. Habrá que esperar al menos hasta hoy para conocer el texto de la resolución final del TSJA. Sin embargo, a primera hora de la tarde de ayer el fiscal ya confirmó que iba a ordenar el archivo de la denuncia presentada por este colectivo de vecinos, creado para luchar contra los ruidos e inconveniencias que les provocan las noches de fiesta en las calles de Quintana o El Rosal. No se puede interpretar como una derrota vecinal contra lo que ya es una cruzada en defensa del derecho al descanso y la seguridad, ante los habituales desperfectos en inmuebles y altercados en las calles que denuncia la asociación. De hecho, Gerardo Herrero manifestó que, a partir de ahora, estudiará las situaciones «caso por caso», según le traslade el Ayuntamiento las correspondientes denuncias o expedientes. Los menoresPor otra parte, a finales de noviembre, Herrero y el fiscal de menores, José Alba, se reunieron con la concejala de Bienestar Social, Isabel Pérez-Espinosa; el defensor del Menor, Ignacio Vázquez; la directora del Instituto Asturiano de Atención Social a la Infancia, Gloria Fernández; y representantes del Cuerpo Nacional de Policía, la Guardia Civil y la Policía Local de Mieres, Avilés, Gijón y Oviedo, para debatir soluciones.Entonces, el ministerio fiscal anunció que citaría a declarar a padres de menores que consumieran alcohol en la calle. Además, el Consistorio ovetense se comprometió a enviar un listado de los locales que hubieran incumplido un requerimiento municipal o roto algún precinto. Semanas después, el fiscal jefe declaró que iba a «incoar diligencias de investigación por cada una de las actas» incluidas. Ayer no dejó claro si tomará cartas en el asunto en incumplimientos anteriores, pero sí lo hará en cuantos el Consistorio le haga llegar a partir de ahora. La denunciaAfectados por la Movida ha emprendido su lucha en diferentes frentes: denuncias contra aquellos locales sobre los que tenía indicios de que se saltaban la ordenanza municipal de ruidos; concentraciones como medida de protesta; y también la denuncia contra el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno por la supuesta «dejación de funciones» en el asunto. La responsabilidad del control, en opinión de sus miembros, atañe a ambas administraciones.El colectivo hizo una relación de las medidas que los responsables municipales anunciaron, pero que «nunca cumplieron»: la instalación de bolardos para restringir el acceso a la zona antigua, el control de los horarios de los establecimientos, la medición del ruido que generan, el seguimiento de los precintos, la realización de controles de alcoholemia, la prohibición de nuevas aperturas, la limpieza viaria o una mayor presencia policial en las calles, entre otras.
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