Irún, ciudad sin ley

«Sin ley que proteja a cientos de familias del infierno de las motitos con escape 'trucado'. Ruido que deteriora la calidad de vida, que no nos deja dormir y nos amarga el descanso del fin de semana.

¿Sin ley o sin un Ayuntamiento capaz de cumplir con su obligación?, ¿se declara impotente ante veinte motitos mal contadas? Pues que aprendan de los vecinitos transfronterizos de Hendaya lo que es mantener el ruido del tráfico a raya. Toda respuesta del Ayuntamiento de que «se está elaborando una normativa», es disculpa de mal pagador.

Hay que actuar y hacerlo YA. El Ayuntamiento está obligado a acabar con esta lacra.

Pagamos como si viviéramos en una ciudad europea y padecemos una calidad de vida urbana propia de una población tercermundista. Si el alcalde no puede solucionar este problema, ¿qué pasará cuando deba enfrentarse a problemas más graves? Creo hablar por boca de muchas familias afectadas. La suerte de nuestros políticos es que gobiernan una sociedad poco habituada a la reclamación judicial.

Hay sentencias del Tribunal Supremo que condenan a un ayuntamiento por lesionar derechos fundamentales de los ciudadanos por conducta pasiva. Desde aquí animo a la ciudadanía a presentar todos y cada uno de nosotros una reclamación ante el SAC, a ver si conseguimos ablandar los duros oídos de nuestros munícipes».

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