El club de 'Harleys' niega cualquier relación con la algarada de la calle de Carpio

D. R.

El Harley-Davidson Club del Principado de Asturias niega cualquier relación con los ruidos que, en la madrugada del domingo, impidieron dormir a los vecinos de la calle de Carpio, en El Antiguo. Su vicepresidente, Enrique Iglesias, confirmó lo dicho por un portavoz del club el pasado domingo, y desmintió que ninguno de sus miembros tuviese relación alguna con el grupo de motoristas al que denunciaron varios vecinos.

La Policía Local había informado de que integrantes de la asociación habían cenado en un céntrico restaurante con motivo de su reunión anual, lo que creó cierta confusión y llevó a relacionarles con el altercado.

Sin embargo, Iglesias aclaró que tenían permiso para aparcar sus vehículos a la puerta del establecimiento, y que, tras el encuentro, regresaron a sus lugares de origen sin atravesar el casco urbano. «Sobre la una y media de la mañana», dijo Iglesias, representante de los aficionados a estas clásicas motos de paseo, procedentes de diversas localidades del Principado. «En la región, hay otras cien personas que tienen una Harley-Davidson», añadió el vicepresidente, quien recordó que no es una moto para hacer carreras, sino que es un vehículo de paseo dada su relativamente baja velocidad máxima.

Entre los fines del club está fomentar valores sociales. Recordaron que han ayudado a niños y jóvenes con enfermedades, tanto dentro, como fuera de Asturias. Un ejemplo es el apoyo que le han dado a Vanesa, la 'Niña de Cristal'. No en vano, entre sus objetivos está promover la convivencia y una imagen diferente a la que muchas personas tienen del aficionado a las motocicletas.

El día del suceso, fuentes de la Policía Local informaron de que habían disuelto la concentración sin mayores incidentes, y que los agentes no intervinieron en detención alguna.

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