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Oviedo, 26/4/2000
Infraestructuras y Urbanismo estudian hoy los expedientes que tratan de hacer compatible la convivencia de vecinos y bares en el casco viejo
La nueva ordenanza de ruidos y el proyecto del Palacio de los Niños dividen al PSOE
Ángeles SOLÍS / Sandra SOLÍS
Las comisiones de Infraestructuras y Urbanismo estudian hoy tres expedientes sobre la nueva ordenanza de ruidos y la construcción de un Palacio de los Niños en el Parque de Invierno que han provocado una importante división de criterios en el grupo municipal del PSOE.La nueva ordenanza de ruidos incluye una modificación del plan especial del casco viejo y con ella se pretende hacer compatible la convivencia de vecinos y bares en el Oviedo antiguo.
El PSOE va a apoyar al parecer la modificación, aunque con matices, tras un fuerte debate en el seno del propio Grupo municipal Socialista, parte del cual quería defender la misma postura que las asociaciones vecinales, que rechazan la legalización de los locales con música en el casco antiguo.
Precisiones técnicas
El PSOE hará algunas precisiones técnicas sobre los sonómetros, exigirá que haya personal municipal para controlar el cumplimiento de la ordenanza y pedirá una reunión a celebrar en tres meses para comprobar, local a local, la aplicación de la nueva normativa.A Infraestructuras se presenta también una modificación de usos –de espacio libre a lúdico infantil– que permitirá construir un Palacio de los Niños en el Parque de Invierno, que se hará por un convenio entre Ayuntamiento y Cinturón Verde.
Cuando se planteó este proyecto, el portavoz socialista, Leopoldo Tolivar, y el concejal Alberto Mortera discreparon de los informes técnicos que aseguraban que el cambio de uso es legal y anunciaron que pedirían un informe al Consejo de Estado.
Según ha podido saber este periódico, esa postura no era compartida por todo el Grupo Socialista, con importantes discrepancias al respecto en su seno. El PSOE ha suavizado su postura, y según informó ayer Mortera, se abstendrán en el cambio de uso que se propone aprobar y, «aunque preferimos un proyecto cojo a ninguno», manifiestan sus dudas sobre que el elegido sea el lugar idóneo.
Debate
Roberto Sánchez Ramos, concejal de IU, planteará hoy en la Comisión de Urbanismo que el debate sobre el Oviedo antiguo no se limite a la modificación del plan espacial del casco viejo y al cambio de la ordenanza de ruidos. «El problema no se puede solucionar sólo con estas modificaciones, hay que abordar el asunto de una vez por todas desde el punto de vista global e intentar llegar a la convivencia de bares de copas, vecinos y comercios en la zona», manifestó.La coalición presentará un informe jurídico encargado a un abogado en el que se proponen «dudas razonadas jurídicamente sobre la conveniencia de modificar ese plan». Según el concejal, en el casco viejo se produce una serie de contradicciones. Hay unas ordenanzas que no se cumplen –«porque no hay voluntad política de que se cumplan»–, se construyen pisos de lujo que se venden a 300.000 pesetas el metro cuadrado y, en los bajos de esos inmuebles, proliferan los bares de copas, con las consiguientes quejas de los nuevos vecinos del Antiguo.
«Este problema no lo había antes. ¿Qué ocurre? Que los únicos que pueden pagar las rentas que exigen los constructores por los bajos, entre 300.000 y 600.000 pesetas, son los dueños de los bares. Una tienda de comestibles o una pequeña librería no podrían hacer frente a esos gastos. Se debería potenciar otro tipo de actividad desde la concejalía de Comercio», reflexionó Sánchez Ramos, que aseguró que hablará «de todo esto» hoy en la comisión. IU también propondrá la declaración del Oviedo antiguo como zona ambientalmente protegida.
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