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Madrid, 30/05/03
El 75% de las quejas, contra las discotecas
EFE
El 75% de las quejas que el Defensor del Pueblo ha recibido en 2002 por contaminación acústica se refieren al ruido provocado por bares y discotecas, ante el que los ayuntamientos «no es que bajen la guardia, sino que dejan de actuar en absoluto» cuando no son capaces de atajarlo.Ésta es una de las conclusiones sobre cuestiones medioambientales contenidas en el Informe 2002 del Defensor, registrado en el Congreso y al que tuvo acceso Efe.
La falta de colaboración con los ayuntamientos de algunas diputaciones provinciales y, en menor medida, de las comunidades autónomas en materia de contaminación acústica, es «notable», según el informe.
El ruido es uno de los motivos de queja más habitual ante el Defensor y en muchas ocasiones se fundamenta la pretensión en el derecho a disfrutar de «una vida digna, lo que manifiesta tanto la impotencia para resolver por cuenta propia la contaminación que se padece como el alcance auténticamente vital (fisiológico, psicológico)» de sus «nocivos efectos».
Es habitual en esas quejas que vayan aparejadas de un incumplimiento por los locales públicos ruidosos de los horarios de cierre o por las actividades ruidosas de los lapsos autorizados de funcionamiento.
Sin embargo, contaminación acústica y periodos de actividad «pueden encontrarse regulados en disposiciones distintas y ser competencia de administraciones públicas también diferentes, otra razón más que cargar a la desazón de los reclamantes».
El Defensor del Pueblo considera «paradójico» que a pesar de las reiteradas denuncias interpuestas por los vecinos, no se realicen las inspecciones acústicas dirigidas a comprobar la veracidad de las denuncias presentadas por los ciudadanos.
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