Había mucho ruido porque el bajo no estaba acondicionado

El Valedor ordena el traslado de un taller que molestaba a los vecinos

Redacción • Vilagarcía

Los vecinos de un piso de la zona de As Bocas lograron el apoyo del Valedor do Pobo para desalojar del edificio un taller de protésico dental cuya actividad provocaba numerosas molestias a los habitantes del bloque.

Después de casi año y medio de trámites por parte de los vecinos, las gestiones realizadas por el Valedor do Pobo dieron como resultado el traslado del taller, que se hizo efectivo después de las vacaciones de Semana Santa.

La presidenta de la comunidad de propietarios, Francisca Barreiro Romero, explicó que el bajo en el que trabajaba este protésico no estaba acondicionado adecuadamente, por lo que los vecinos soportaban el ruido constante que generaban las máquinas del taller, así como vibraciones y olores. Además, según explicó, el agua sucia y sustancias resultantes de la actividad del protésico iban a parar a través de un desagüe al jardín de la comunidad de vecinos.

La molestias afectaban de forma especial a la familia que habitaba la vivienda ubicada en el bajo situado al lado del taller, y a los dos pisos superiores, aunque los olores también alcanzaban a la vivienda de la segunda planta, según comentó la presidenta de la comunidad.

Francisca Barreiro explicó que la situación se volvió insoportable porque el taller funcionaba muchos días hasta pasadas las doce de la noche y otras veces dejaba enchufado un compresor que se encendía y apagaba intermitentemente durante toda la noche, alterando el descanso de niños y adultos.

La presidenta de la comunidad de propietarios agradeció la labor desarrollada por el Valedor a la vez que criticó durante al gobierno local “que ni nos recibieron, ni nos hicieron caso y el Valedor tuvo que requerirles varias veces la información solicitada”, explicó Barreiro.

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